En el actual panorama político, las redes sociales se han convertido en un espacio clave para moldear percepciones y difundir narrativas. En los últimos meses, se ha detectado un aumento en el uso de cuentas anónimas o falsas que buscan influir en la opinión pública y manipular la información. Un ejemplo que ha llamado la atención es el de “Ranita News”, cuenta en la plataforma X con el usuario @pesterana, creada en agosto de 2021.
Desde su creación, el perfil ha publicado de manera constante mensajes críticos hacia figuras vinculadas al Partido Libertad y Refundación.
Paralelamente, varias usuarias de X han denunciado que recibieron mensajes privados con contenido de acoso, presuntamente enviados desde esta cuenta. Según estos señalamientos, algunos de estos mensajes se habrían enviado mientras la persona detrás del perfil se encontraba bajo los efectos del alcohol.
Detrás de “Ranita News”: antecedentes laborales y señalamientos públicos
Publicaciones en línea han vinculado la cuenta con René Alberto Murillo Torres, de 51 años, residente en la colonia Villa Olímpica del Distrito Central, casado con Waldina Lizeth Castro Oyuela, con quien tiene una hija. De acuerdo con información de dominio público, Murillo Torres es licenciado en Administración de Empresas y dirige la empresa Murillo Proyectos, dedicada a bienes raíces.
En el ámbito laboral, trabajó como supervisor de proyectos en el Programa de Asignación Familiar (PRAF) desde 2006 hasta 2022. Dicho periodo abarca los años en que el Ministerio Público reportó un desfalco de más de 96 millones de lempiras en esa institución, según datos disponibles en el Instituto de Acceso a la Información Pública.
El reto de las cuentas anónimas en la política digital
Expertos en comunicación política advierten que las cuentas sin identidad confirmada, como “Ranita News”, pueden operar como instrumentos de hostigamiento y manipulación narrativa. El anonimato y la falta de mecanismos efectivos para verificar la autoría de los perfiles dificultan la identificación de responsabilidades y permiten que este tipo de cuentas sigan influyendo en la conversación pública.
